Este jabón combina el saber hacer ancestral sirio de la fabricación del jabón de Alepo con las virtudes del rhassoul y el aceite de argán.
El Rhassoul es un suelo arcilloso usado por sus beneficios sobre la piel grasa. Limpia la piel de todas las impurezas y cierra los poros. El aceite de argán, rico en vitamina E, nutre la piel en profundidad y preserva su elasticidad.
Disfruta de los beneficios regeneradores y antienvejecimiento del aceite de argán asociados a las cualidades purificadoras del rhassoul en este jabón de Alepo y encuentra una tez radiante y brillante.
OLIVATO DE SODIO, AQUA (AGUA), ARCILLA DE LAVA MARROQUÍ, ACEITE DE ARGANIA SPINOSA (ARGÁN), LAURELATO DE SODIO, GLICERINA, CLORURO DE SODIO, HIDRÓXIDO DE SODIO.
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